Las arrugas son uno de los signos más reconocibles del proceso de envejecimiento cronológico.
Existen dos tipos de arrugas:
1. Arrugas dinámicas o arrugas de expresión: producidas por el movimiento de los músculos de la cara.
Suelen estar localizadas en zonas donde la contractura muscular es mayor, como las arrugas de la frente o las patas de gallo .
2. Arrugas estáticas o surcos : visibles sin mover ningún músculo. Están relacionadas con el descolgamiento progresivo de la piel, por la pérdida de la grasa y la pérdida de colageno y elastina en la dermis.
Las arrugas finas y abundantes que están repartidas por toda la cara, especialmente visibles en las mejillas y alrededor de la boca, son arrugas estáticas o surcos, como el surco nasogeniano , las líneas de marioneta o la arruga del entrecejo (glabela) .